Para muchos es época de largas jornadas, inversión y ganancias; para otros, tiempo de trabajo en casa haciendo todo aquello que se pospuso durante todo el año. Para algunos, período de total descanso y relax bien merecido. Sin embargo, todos tienen algo en común, todos pueden hacer algo más en las próximas horas, algo especial antes de que entre el año nuevo.
Muchos piensan que a estas alturas del año prácticamente nada relevante podemos hacer, la cotidianidad se ve afectada por las costumbres de la fecha, y muchas cosas se posponen para después de la primera semana de enero. Sin embargo, creo que es mucho lo que todavía podemos hacer en estos 3 últimos días del 2011.

Quizás tienes una llamada pendiente, una visita que no has concretado, quizás sea un buen momento para enseriarte con ese libro que desde hace rato sabes que necesitas terminar de leer. Quizás debes ir a algún lugar con unas galletas y desearle a alguien bendiciones en este año nuevo, reparar una avería en tu casa o en tu carro, pintar esa pared que desde hace mucho clama por una muestra de cariño.

Piensa bien, en estos tres últimos días del año todavía puedes impactar a alguien, o mejor aun puedes impactarte a ti mismo. Decídete a hacerlo y sorpréndete, dándote la satisfacción de haberlo logrado antes de que el año terminara.

Nuestro tiempo está en las manos del Señor, y es grato saber que aprovechamos bien la vida que nos ha dado (Efesios 5:16), aun cuando el mundo pareciera detenerse por la fecha, nosotros seguimos en movimiento y todavía podemos hacer algo más.

Hagámoslo!