Cuidado con eso , Destellos , En honor a los amigos , En Venezuela , Un poco de mi

Aparentemente vivos, pero muertos.

jueves, noviembre 27, 2014

Después de un largo recorrido llegamos al plantío de eucalipto. Centenas de hectáreas llenas de verde, hileras infinitas de varas erguidas cuyas hojas las mecía el viento. El susurro de un árbol con el otro esparció rápidamente el comentario, tenían visita.

Estuvimos en San Carlos, una llanura preciosa, un pedacito de mi Venezuela que no conocíamos. El lugar donde se produce la materia prima para la fabricación del papel que se consume en todo el país. Los guías anfitriones hicieron del recorrido una verdadera expedición, estábamos insertos en la espesura de un llano cálido y recóndito, extenso y acogedor. Los chiguires nos saludaron en manada, seguramente creyeron que eramos alguna especie extraña que se había apostado a las orillas del lago para contemplarles durante su baño. Saludamos a la señora Ave Prehistórica mejor conocida como la "Chechena", una especie de gallina con amplias alas capaz de surcar el viento, un ave con look de tribu urbana, que nunca antes vi. Ademas de Pancha, la lora que se quedó a vivir cerca del comedor, el avestruz con el pico rojo, a quien casi importunamos durante su danza nupcial.

Fueron muchas las cosas nuevas que vimos en San Carlos, un rato fue suficiente para escribir esto y mucho más, sin embargo no fue nada de lo que he dicho lo que me llevó a contarles la experiencia. Fue tan solo un comentario, una frase que quizás pudo haber pasado desapercibida, pero por alguna razón se hizo resonante en mis oídos. Mientras miraba las verdes hileras, el ingeniero hablaba del inventario de los "individuos", refiriéndose a los arboles, sus medidas, y condiciones de vida, hasta que para finalizar dijo: - contando también a los que mueren en pie.

De inmediato y con premura pregunté: ¿mueren en pie?... la respuesta del experto hizo delante de mi un símil profundo de lo que en ciertas ocasiones podemos ver en algunas personas ignorando a veces su verdadera condición. 

Están entre la multitud, son parte de la hilera que se extiende en el infinito, tan iguales como el resto, a simple vista jamas sabrías que aunque esté de pie, el árbol ha muerto.

A menudo observamos y consideramos, juzgando luego en base a lo que vimos. Y podemos admirar, criticar, enaltecer o reducir, a ese "individuo" que miramos con la misma altura, y en igualdad de condiciones al resto, pero al momento de contarlo como materia prima productiva, se queda reducido en una cantera de utilidad secundaria. La madera de estos arboles no se junta con la madera de los vivos, para no degradar la calidad de aquellos que a pesar de las condiciones de ambiente y suelo permanecieron intactos, saludables y fuertes, llenos de vida tanto por dentro como por fuera.

Creo que de ahora en adelante tendré mas cuidado, a veces cometemos el error de considerar a algunos individuos buenos, sólo porque se ven buenos, con aspecto admirable, pero finalmente todo es aparente, aunque estén de pie, tristemente han muerto. Tampoco propongo cortarlos, apelo a las palabras del Señor con respecto a la cizaña, cuando indicó que era el Padre quien cortaba y echaba al fuego. Sólo escribo como advertencia.

De regreso a casa, mientras una parte de mí dormía por el cansancio, otra meditaba profundamente en las verdades expuestas en el Salmo 1:

Bienaventurado el varón que no anduvo en consejo de malos,
Ni estuvo en camino de pecadores,
Ni en silla de escarnecedores se ha sentado;
Sino que en la ley de Jehová está su delicia,
Y en su ley medita de día y de noche.
Será como árbol plantado junto a corrientes de aguas,Que da su fruto en su tiempo,Y su hoja no cae;Y todo lo que hace, prosperará.
No así los malos,
Que son como el tamo que arrebata el viento.

Por tanto, no se levantarán los malos en el juicio,
Ni los pecadores en la congregación de los justos.
Porque Jehová conoce el camino de los justos;
Mas la senda de los malos perecerá.


El árbol muerto se reduce al polvo, el vivo dejará huella. Mantente cerca de la corriente, de las aguas que brotando dentro y fuera de ti te mantendrán con vida. No juntes tu madera con aquellos que insertos en las filas de los vivos dejaron de vivir hace ya mucho tiempo.

Otras que te Gustarán

0 comentarios

SUSCRIBETE

Entregado por FeedBurner

Sociales