Hace unos días me obsequiaron un hermoso calendario 2013. Con pintorescas imágenes según el mes, y por cada día un verso en especifico. Me parece inspirador y refrescante, asegurándome a diario una porción de bendición para todo el año.
Colgué el calendario en una de las paredes de mi cocina, ya me veo leyendo esos versos muy temprano en las mañanas mientras tome mi taza de café.
Me quedé mirando el calendario, contemplando lo lindo que se ve colgado allí, y fue como si pudiera hundir mis ojos aún mas profundamente, como si pudiera echar un vistazo de antemano a esos días que todavía no llegan.